En estos días, la Vicerrectoría de Pregrado pone en marcha este importante proceso de actualización, con énfasis en la participación de diversos actores del proceso educativo de pregrado.

Los cambiantes escenarios locales y globales en el ámbito de la educación superior y de los diferentes campos de acción profesional, hacen necesaria la actualización de la Política de Formación Profesional que rige los procesos formativos de esta casa de estudios y que nunca antes ha sido revisada.

Los responsables de esta revisión son los equipos técnicos de la Vicerrectoría de Pregrado UFRO que, en acuerdo con el Comité Directivo Institucional, asume la labor de poner en marcha un riguroso proceso, organizado en etapas, y que considera la participación de actores relevantes del proceso formativo institucional como son Vicerrectores, Director de Análisis Institucional, Decanos, Directores de Departamento, Directores de Carrera, docentes, estudiantes y titulados.

El espíritu que impregna el trabajo que se inicia en estos días, es el de identificar aspectos de mejora, a partir del análisis de fortalezas y debilidades de la implementación de la Política de Formación Profesional llevada a cabo entre 2008 y 2016. La idea –asegura la vicerrectora de Pregrado, Ana Moraga- es “realizar esta discusión interna de manera amplia, para determinar las brechas que pudiesen existir entre la actual política y los desafíos que nos impone el actual escenario en Educación Superior”.

LÍNEA BASE
La Política de Formación Profesional (PFP) vigente, data del año 2008 y entrega definiciones y orientaciones diferenciadoras de los procesos formativos de la Universidad de La Frontera, considerando su contexto y cultura.

“Esta política formativa responde a los lineamientos misionales que tiene nuestra Universidad y su actualización hará énfasis, entre otros aspectos, en nuestro compromiso con una educación centrada en el estudiante, la innovación curricular acorde a las orientaciones que promueve el marco de cualificaciones, la articulación de pre y post grado, y el compromiso con la Responsabilidad Social y equidad que tiene nuestra institución” , explica Ana Moraga, Vicerrectora de Pregrado.

El proceso de actualización es una oportunidad para generar una revisión analítica de su funcionamiento, permitiendo la identificación de fortalezas y áreas de mejora. “La actualización de la política nos permitirá mirarnos y poder hacer una evaluación y análisis sobre cómo hemos hecho esta implementación. También incluiremos los nuevos desafíos de la Educación Superior y, de esta manera, enfrentaremos informadamente y con participación de diversos actores, este importante proceso de actualización”, señala Moraga, enfatizando que el proceso también servirá para “reposicionar los fundamentos y lineamientos que esta Política, que entre otros aspectos esenciales promueve nuestro compromiso con el perfil del titulado”.

CÓMO SE REALIZARÁ LA ACTUALIZACIÓN
El proceso de actualización se diseñó en 4 etapas, que se llevarán a cabo entre noviembre 2016 y agosto 2017.

La primera etapa, ya en marcha, busca describir la implementación de la Política de Formación Profesional entre los años 2008-2016. Esta fase precisa la revisión del relato de las principales estrategias implementadas y sus logros, para lo cual se está tomando contacto con actores claves que puedan reportar su percepción, entre otros, Decanos, Directores de Carrera, Directores de Departamento, Docentes, y estudiantes.

La segunda etapa, que se realiza de manera paralela a la 1, corresponde a la identificación de brechas con las tendencias actuales en la Educación Superior. Esta fase será conducida por el equipo de la Vicerrectoría de Pregrado, con apoyo profesional de la Dirección de Análisis y Desarrollo Institucional, y contempla la revisión y análisis de diversos documentos que sustentan los desafíos en educación superior, así como de modelos educativos de diversas universidades nacionales e internacionales.

La tercera, en tanto, se centrará en la identificación de los aspectos a actualizar, para pasar luego a la última etapa de redacción de la propuesta de actualización propiamente tal y sus canales formales de aprobación.

Escrito por: Dirección de Comunicaciones
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