La actividad se desarrolló en las tres universidades que integran el consorcio y fue dictada por el Instituto iDEAUFRO.

Introducir a los docentes en el diseño de experiencias de aprendizaje activo, a través de la metodología JustFail, que aplica el conocimiento en ciencia, tecnología, ingeniería y matemática para la resolución de desafíos, fue el objetivo del encuentro que congregó a docentes de la MacroFacultad de Ingeniería.

Se trató del taller JustFail: una metodología para la formación de innovadores tecnológicos, donde el alumno aparece como centro del proceso de aprendizaje, que fue dirigida por Carlos Isaacs y Belén Conejeros, director y coordinadora general del Instituto de Innovación y Emprendimiento iDEAUFRO de la Universidad de La Frontera.

En esta metodología, considerada de fallo inteligente, el estudiante se debe equivocar y ese error lo lleva a aumentar su umbral de tolerancia al riesgo y a la frustración, enseñándole a enfrentar de mejor forma los desafíos que les plantea su desarrollo profesional. “Una vez que ellos fallan, toman conciencia de que requieren conocimiento y en ese momento el docente se los entrega de forma inteligente”, indicó Carlos Isaacs.

“No estamos acostumbrados a que el aprendizaje sea activo. En ese sentido, nuestra idea es ir compartiendo nuestra experiencia y metodología, y ofrecer nuestro acompañamiento para el diseño de experiencias de aprendizaje activo”, agregó Belén Conejeros, coordinadora general de iDEAUFRO.

Perfeccionamiento académico

La jornada fue organizada por el Hub de Formación de la MacroFacultad de Ingeniería en conjunto con el Instituto de Innovación de la Universidad de La Frontera IDEAUFRO, y se desarrolló en las tres universidades que integran el consorcio.

En este sentido, Juan Carlos Figueroa, director del Nodo de Formación de la Universidad del Bío Bío, comentó que el HUB está definiendo un programa de perfeccionamiento académico, que involucra varias metodologías de enseñanza. “Esta actividad es parte de ese grupo de técnicas que vamos a entregar a nuestros docentes para que puedan abordar la enseñanza de un ingeniero de clase mundial”, dijo.

“El taller se ajusta perfectamente a los objetivos que tenemos como Hub de Formación. Queremos ir fomentando las competencias de innovación y emprendimiento en un ambiente que conjuga ciencias, tecnología, ingeniería y matemática”, añadió Paul Fuentes, director del Nodo de Formación de la Universidad de Talca.

Para Leticia Galleguillos, directora ejecutivade la MacroFacultad en la UBB, el taller significó un aprendizaje interesante, que permite ponerse en el lugar del estudiante frente a los desafíos que el profesor le entrega. “Esto implica que cualquier instrucción que le demos al alumno debe ser bastante clara para la pueda resolver y llegar al objetivo final”, indicó.

En ese contexto, Paula Larraín, ejecutiva regional de La Araucanía de Corfo, expresó que “la idea es contar con un capital humano mejorado, con mayores capacidades y habilidades, que conozcan las nuevas tecnologías, y para eso es fundamental que los profesores se acerquen a estos nuevos procesos”.

DOCENTES

Sobre el taller, Fabricio Salgado, director de la Escuela de Ingeniería Civil Eléctrica de la UBB, manifestó que “la actividad me pareció bastante práctica y el aprendizaje obtenido fue variado, desde conocer a los colegas con quienes compartimos en la mesa y la metodología JustFail”.

En tanto, Leonardo Albornoz, docente de la Escuela de Ingeniería Matemática de la U. Talca, sostuvo que “este taller permite darse cuenta cuál es la mirada que tiene el estudiante respecto a lo que le pide el docente y permite planificar mejor el trabajo que se desarrolla con ellos”.

Finalmente Helmuth Leal, académico del Departamento de Ingeniería Química de la UFRO, dijo que “estas actividades son esenciales, porque a los estudiantes les encanta la parte lúdica, yel hecho que desarrollen cosas mejora los lazos de colaboración, la distribución de trabajo y potencia las capacidades de cada uno. Creo que esta metodología es importante para los alumnos”, concluyó.

Fuente: Proyecto Ingeniería 2030