Hace un tiempo atrás, escribí una columna relacionada con la confianza y credibilidad en las instituciones del país. En esa oportunidad, y según el Centro de Estudios Públicos, las universidades lideraban la encuesta.

Desde ese lugar, desde la universidad, creo que es necesario retomar el tema, principalmente por el nuevo Chile que se avecina.

La confianza tiene que ver con la esperanza. Es, cuando una persona espera firmemente que algo suceda o funcione de forma determinada.

En diciembre, Chile eligió a un nuevo presidente, y esa elección fue motivada por la confianza de vivir en un país mejor, más justo, democrático, equitativo y solidario. Preocupaciones como derechos sociales, delincuencia y orden público y economía, serán las principales áreas que el equipo del nuevo líder deberá abordar; temas de primer orden que ocupan y preocupan a gran parte de la ciudadanía.

Son cambios y mejoras que chilenas y chilenos esperamos que sucedan, porque depositamos nuestra confianza y esperanza en esta apuesta de gobierno joven. La relación entre credibilidad, respeto, confianza y liderazgo, es clave, y será determinante para la ciudadanía en este momento país.

Si logramos seguir en esa línea, y podemos confiar los unos en los otros y ser recíprocos, sentaremos las bases para avanzar firmemente como sociedad en temas que por años han estado en entredicho y suspenso.

La confianza es, sin duda, una vía para construir grandes sueños. Ha llegado nuestro momento como sociedad de confiar y honrar la elección que hemos hecho, pues en ella, también, están presentes el respeto y la sinceridad.

Dr. Eduardo Hebel Weiss
Rector