Los últimos datos respecto de innovación, patentamiento e inversión señalan que, a nivel Latinoamericano, Chile está considerado como el segundo país más innovador (el primero es Brasil) según la OMPI. El gasto del país en I+D ha sido estable en el tiempo y bordeó en 2019 los 680 mil millones de pesos anuales. Respecto del PIB la inversión en I+D es de un poco más de 400 mil millones. Eso se traduce en un 23% de empresas que innovan y las solicitudes de patentes para invenciones son de 9 por cada millón de habitantes. Todos estos antecedentes van de la mano con la producción científica, la cual está concentrada en las universidades.

Señalo lo anterior porque los datos del Ministerio de C&T indican que La Araucanía tiene la mayor productividad científica a nivel nacional. Y es aquí donde surge la oportunidad de la que quiero hablar: la influencia de la ciencia, tecnología, innovación y creatividad en el territorio han producido un positivo cambio que nos impulsa a mirar a la región y actuar en ella desde otra perspectiva. Hemos alcanzado un diversificación productiva, nuestro fuerte ya no es solo la madera, las siembras o la ganadería; hoy contamos con talentos locales que han visibilizado coyunturas para innovar en los negocios partiendo de la cultura y belleza regional; la industria creativa y nuevos talentos se han asentado en la zona lacustre, el empresariado vitivinícola ha apostado por esta tierra para su futura producción y por si fuera poco, la naturaleza que nos rodea es un laboratorio único de oportunidades enriquecido con la cultura de nuestro pueblo originario.

La fuerza y futuro de estas oportunidades está y estará dada por los más de 60 mil jóvenes estudiantes de educación superior que hay en Temuco, los que hoy se mueven entre conceptos y conocimientos totalmente actuales y que serán parte de su trabajo en el corto plazo: me refiero a Metaverso, Inteligencia Artificial, Naturaleza Editable, Blockchain y Tecnologías Verdes, por citar algunos.

Si sumamos todos estos elementos -oportunidades, territorio juventud, actualización y empuje- el camino que se vislumbra está lleno de posibilidades, donde todas y todos podemos ser parte de ese nuevo futuro.

Escrito por: Eduardo Hebel Weiss
Rector Universidad de La Frontera