Las recientes medidas proteccionistas del gobierno de Estados Unidos (EE. UU.) de aplicar aranceles adicionales a las importaciones del resto del mundo, donde en el caso de Chile se fijó una tasa de 10% que deberán pagar los envíos nacionales al entrar a terreno estadounidense son en general una mala política, que va en contra de los fundamentos económicos ya que genera efectos negativos al propio país que los impone (mayores precios para consumidores internos, malas relaciones comerciales, entre otros). Sienta además un mal precedente de no respetar los acuerdos comerciales previos que tenía EE. UU. con países, incluido el caso de Chile. Adicionalmente, se producen represalias de los países afectados y se inicia una guerra comercial que afecta el comercio y crecimiento mundial. Existe evidencia teórica y empírica que muestra que estas medidas no son positivas.
Si bien nuestro país quedó con la tasa base de 10% que podría calificarse como “lo menos malo” al compararse con otros países cuyas sobretasas son significativamente mayores (China 34%; Vietnam 46%; UE 20%; entre otros) lo cierto es que, aunque menores, igual habrá impactos en Chile por la sobretasa. ¿Y en La Araucanía? … en principio el impacto es acotado, dado por un lado que EE. UU. no es el principal destino de las exportaciones de la región, es el segundo socio comercial detrás de China; y por otro lado tenemos que la madera y el cobre están excluidas del arancel del 10% (hasta ahora), y La Araucanía tiene importantes exportaciones forestales donde destaca la madera, que en principio no se vería afectada. Estos 2 elemento atenúan el impacto regional. Sin embargo, habrá un efecto en los envíos de los otros sectores exportadores, especialmente en el silvoagropecuario, donde la fruticultura sería la más afectada con las manzanas, cerezas y arándanos. Probablemente también en menor escala en la industria de alimentos (cereales y derivados junto a la carne) y en la agricultura (avena, semillas y productos forrajeros)
El arancel de 10% es un impuesto que aumentará los costos de los productores locales al exportar a EE. UU. restando competitividad frente a otros vendedores del producto en el mercado estadounidense. Por tanto, implica mayores costos, menor margen, reducción de envíos.
Pero más allá de los efectos directos del 10% (que debieran ser acotados) habrá que considerar los efectos indirectos que estas medidas tendrán. La menor demanda de nuestros productos que probablemente haga China por los altos aranceles que le impuso EE. UU. lo que afectará su economía, su crecimiento y sus compras a Chile y a La Araucanía. Adicionalmente, en el mediano plazo podemos ver alzas de precios en los productos afectados, lo que hará reducir la demanda mundial y también golpeará por esa vía al país y la región.